Se prevé que ya incluso este viernes se hagan algunas pruebas para comprobar que la chimenea funciona.
Cuando todos se encuentren en la Capilla Sixtina, el maestro ceremoniero, Diego Ravelli, pronunciará la fórmula ‘extra omnes’ (todos fuera) para pedir que abandone el lugar todo aquel que no sea cardenal elector.
Desde ese momento comenzará el cónclave, con dos votaciones por la mañana y dos por la tarde hasta que se elija a un pontífice con dos tercios de los votos, lo que será anunciado con la ‘fumata blanca’, con el humo blanco desde la chimenea de la Sixtina.
Los cardenales electores en el cónclave descienden a 133
Actualmente el Colegio Cardenalicio está conformado por un total de 252 cardenales, de los que solo 135 tienen derecho a voto por tener menos de 80 años, pero dos de ellos no participarán en el cónclave por razones de salud.
Uno es el español Antonio Cañizares, arzobispo emérito de Valencia.
Bruni no ha aclarado quiénes son los dos cardenales que faltarán a la cita.
Este martes, la sexta congregación de cardenales, que regula este periodo de ‘sede vacante’ tras el fallecimiento del pontífice, reunió ya a 183 purpurados, de los que unos 120 eran electores.
El lunes día 5 tendrá lugar el juramento del personal que asiste a los purpurados durante el cónclave, como enfermeros o celebrantes litúrgicos.
