GELSENKIRCHEN, Alemania (AP) — Jude Bellingham es el modelo para la marca de ropa interior de Kim Kardashian. El ícono inglés David Beckham imita su tradicional gesto cuando marca un gol. Y una canción clásica de los Beatles se ha convertido en su banda sonora, con sus seguidores serenándole el estribillo de “Hey Jude” cuando salta a la cancha.
Hoy por hoy, Bellingham lo hace todo bien. Y no debió sorprender a nadie que el encargado de poner a Inglaterra en órbita en esta Euro 2022. Su gol en el primer tiempo bastó para asegurar la victoria 2-1 ante Serbia en Gelsenkirchen el domingo.
“Siento que soy capaz de tener un impacto en cada partido. Siento que puedo decidir los partidos”, señaló el astro del Real Madrid. “Disfruto jugar. Así que cuando estoy en la cancha, juego sin temor alguno, porque me encanta. Es una sensación liberadora”.
Con el número 10 en la camiseta que una vez lució Wayne Rooney, el versátil mediocampista se elevó para cabecear el centro de Bukayo Saka. Se plantó frente a la tribuna para hacer la pose firme con los brazos abiertos de par en par, una celebración que los hinchas del Madrid adoran y que Beckham ha imitado en las redes sociales.
Bellingham habla en la cancha, como lo evidenció en una sensacional primera temporada con el Madrid, firmando 23 goles, coronándose campeón de La Liga y de la Liga de Campeones.
Y como Beckham, su atractivo va más allá del fútbol. Fue lo que habrá hecho que Kardashian le fichara para modelar la ropa interior masculina de su marca SKIMS. También es la estrella de una campaña publicitaria de Adidas.
Tantas cosas para alguien tan joven podría ser mucho.
Pero Bellingham no es un futbolista promedio.
“Se encarga de escribrir su propio guion”, comentó el seleccionador inglés Southgate.
Bellingham fue la figura del encuentro, convirtiéndose en el primer jugador europeo que actúa en tres grandes torneos internacionales ante de cumplir los 21 años — tiene 20 años y 353 días. También puede presumir de goles tanto en un Mundial como una Eurocopa.
Como local en el estadio Wembley de Londres, el equipo de Southgate sucumbió por penales en la final de la pasada Eurocopa, y vuelve a la carga en Alemania con el cartel de favorita. Serbia disputa su primera Euro desde 2000.